Según han informado numerosas fuentes, esta pérdida se
producía desde que el camión salió del armario garaje.
La policía está investigando al conductor y a los dueños
del transporte, ya que se ha descubierto que este formaba parte de una red de
contrabando de palomas. "Trataban de disimular, pero se les veía la pluma
a la legua" ha afirmado el comisario encargado del caso.
Por este motivo se ha enviado una patrulla a vigilar al
director de la compañía, aunque según rumores recientes, este les habría
despistado al cambiarse de acera. Su esposa, sin embargo, ya ha sido detenida en
el local que regenta, una bollería. Fuentes pertenecientes a la comisaría afirman
que la mujer ya ha se ha ganado el cariño de todos los trabajadores, ya que “cocina
unas tortillas como nadie”.
Para luchar contra esta nueva oleada de crímenes, el
departamento central de Policía ha implantado una política de intercambio de
parejas, afirmando que esto "puede favorecer la creatividad, hacer que los
agentes experimenten nuevas sensaciones y huyan de la monotonía".